Tan fáciles que parece una broma, tan ricas que conquistará a grandes y pequeños… Así son las trufas que os propongo hoy :-D
Fue una de las recetas que hice para llevar a la oficina el día de mi cumple, y triunfaron, vaya que si triunfaron… :-D No se necesita horno para hacerlas, es una reta perfecta para hacer en familia porque puedes pringarte las manos y además sólo harán falta tres ingredientes. ¿Os apetecen? :-)
Ingredientes:
- 36 galletas oreo (yo utilicé un paquete de oreos normales y un paquete de oreos con doble relleno)
- 230 gr de Queso Philadelphia
- Candy Melts de chocolate o de vainilla (son unas pastillas para derretir que se encuentrar en tiendas especializadas de repostería y que sirven para cubrir trufas y cake pops) en su defecto podéis utilizar sin problemas chocolate para cobertura (negro, con leche o blanco, el que más os guste).
- Opcionalmente extracto de vainilla
Lo primero que haremos será triturar las galletas hasta convertirlas en una arenilla (con la ayuda de la thermomix o de un robot picador se hace en un periquete, si no, siempre podemos recurrir al mortero aunque se tarde más…).
Añadimos entonces el queso Philadelphia y la vainilla y mezclamos hasta que la mezcla sea homogénea.
Ahora haremos las bolitas :-) Vale pringarse las manos, pero cuidado, no os comáis todo el relleno durante este proceso…
Cuando tengáis las bolitas hechas, habrá que meterlas en el congelador durante un par de horas para que se solidifiquen y podamos cubrirlas en chocolate.
Derretimos los Candy melts o el chocolate de cobertura al baño María y cuando esté derretido vamos cubriendo las trufas de una en una (con ayuda de un tenedor será más fácil: echamos la trufa en la cobertura, le damos un par de vueltas y la “pescamos” con el tenedor. Ya solo queda darle unos golpecitos al tenedor con el borde del recipiente para que el exceso de chocolate caiga y poner las trufas cubiertas sobre un papel vegetal para que se asienten).
Antes de que se endurezca la cobertura podéis ponerle las decoraciones que más os gusten. Y ya está, ¡hecho!
Una delicia que no os podéis perder.
¡Espero que os gusten!
Un besazo
